Murió Lucas González, el joven baleado por la Policía de la Ciudad

Este jueves falleció Lucas González, el joven de 17 años que había sido baleado en la cabeza por un agente de la Policía de la Ciudad cuando volvía a su casa.

El joven era jugador de Barracas Central y estaba volviendo de entrenar junto con tres amigos en el barrio de Barracas cuando fueron interceptados por agentes de civil de las fuerzas policiales de la Ciudad. Según el relato policial, los jóvenes huyeron cuando quisieron identificarlos por lo que abrieron fuego sobre el auto por el que se desplazaban. No obstante, desde la familia de la víctima desmienten la versión policial y denuncian que se trata de un caso de gatillo fácil.

Los efectivos de la Policía de la Ciudad que participaron del operativo en el que fue baleado Lucas formaban parte de la brigada de investigaciones de la Comisaría Vecinal 4D, del barrio de Barracas, que patrullan la ciudad vestidos con ropa de civil y en automóviles sin identificación. Fueron apartados de las tareas operativas en la fuerza y se les inició un sumario administrativo.

Cerca de las 17:45 de este jueves, los padres de Lucas fueron convocados por las autoridades del hospital El Cruce de Florencio Varela en el que estaba internado y en ese momento les confirmaron que su hijo había fallecido como consecuencia de las lesiones que le provocaron los balazos.

“Lucas era mi sobrino del corazón y acaba de fallecer. Lo único que le pedimos a todos es que respeten la intimidad de la familia, porque estamos destrozados. Queremos justicia por Lucas. No queremos más a toda esta maldita policía”, enfatizó el tío del jugador fallecido.

El episodio se llevó a cabo este miércoles cuando los cuatro jóvenes salían de entrenar y fueron interceptados por un vehículo sin identificación, en el cual iban policías de la Ciudad de Buenos Aires de civil.

Inmediatamente los jóvenes trataron de huir y los policías realizaron algunos disparos. Uno de ellos fue el que recibió Lucas por lo que fue llevado al Hospital Penna, desde donde luego se lo trasladó al nosocomio de alta complejidad El Cruce, de Florencio Varela.

El adolescente de 17 años se encontraba en "estado crítico" y con asistencia mecánica, según el parte médico difundido por el Hospital El Cruce de esta mañana. El presidente Alberto Fernández había pactado una reunión con la madre del joven pero tras la confirmación de la muerte se suspendió.

Las familias de los adolescentes involucrados declararon públicamente que fue un caso de "gatillo fácil". “Ninguna de las víctimas estaba armada, huyeron porque se asustaron al no poder identificar debidamente a los agentes", aseguraron.

En relación a los policías que les dispararon, el tío del joven señaló: “Queremos que vayan presos, como tienen que ir porque son unos delincuentes. Ellos son los delincuentes por lo que quisieron hacer con los nenes: ensuciar a cuatro nenes que venían de jugar a la pelota y que terminó en esto, en la muerte de Lucas”.

“Queremos justicia, mi compañero no era ningún chorro. Él era un futbolista, se rompía el orto todos los días. Lo único que pedimos es justicia”, comentó un joven a los medios entre lágrimas. Abrazada a él, otro muchacho señaló también llorando: “Lucas era mi hermano, siempre volvíamos juntos y ayer se volvió solo”. “Mataron a un deportista”, dijeron.